Cerezas

Siguiendo con el tema decoupage, os presento lo último que he hecho:

Como no tenía demasiadas ganas de complicarme ni tampoco idea de qué hacer que llevase poco tiempo, probé a hacer decoupage sobre mimbre. Lo había visto, pero me parecía taaaan complicado que me quitaba las ganas. Sólo hacía falta un poquito de mala leche para intentarlo.

Cogí un par de cestas de la cocina y empecé a planear. Me acababa de comprar una servilleta con cerezas, y vi que las cestas eran el lugar perfecto. Lástima que fueran TAN complicadas de recortar...

Y luego... ¿Cómo se pegan servilletas sobre mimbre? Enseguida me di cuenta de que hacerlo de manera tradicional no era lo más indicado, así que coloqué la servilleta como la quería y empecé a aplicarle Alkyl por encima con un pincel. Pronto le cogí el truco, y cuánto me gustó el resultado. Es divertido de hacer, y precioso de ver.

Pasé de rallarme demasiado, así que sólo le apliqué varias capas de Alkyl que, pese a que no es mi preferido, tiene un brillo transparente muy discreto y llamativo a la vez.

Y aquí, una foto más de cerca.

Ya tengo fichadas algunas cestas...

(Gracias por los comentarios, chicas. Un beso para todas ^_^)

Lata latosa

Pues... Me he cansado de intentar hacer craquelados y de pintar en general, pero no del decoupage o, al menos, no del todo.

Entonces, recurrí a lo único que se me ocurrió para sustituir a la pintura: papel de regalo.

Estuve mirando en varias tiendas y no encontré el que quería, ya que la lata en cuestión había pensado forrarla con papel en blanco y negro de filigrana floral. En El Corte Inglés encontré el que más me gustó una vez frustrado mi plan.

Miré en una revista cómo forrar cosas en redondo, y ahí fui...
El cuerpo de la lata no me costó demasiado, pero la tapa... ¡Ay, la tapa! Maldita tapa que me tuvo toda una tarde peleando con ella.
En la revista explicaba que para la tapa había que recortar primero un círculo y luego una tira para el lateral. La tira para el lateral fue lo peor, ya que no daba encontrado la medida...
Y terminé. Y me quedó llena de arrugas, pese a que la parte superior es totalmente plana y pese a que en el resto de la lata no me pasó.
Al menos, al barnizar, quedó perfecta y no se notan las arrugas.

Ahora que llega el calor...

Ahora que llega el calor (buf, qué calor hace por aquí), le haré un homenaje a la primera super bufanda que tejí.
Estaba comenzando a calcetar y, como no sabía qué hacer ni seguir las instrucciones, pues me puse a tejer sin más. Para ella, mi madre me enseñó a hacer punto elástico 1x1. Me explicó que así, aparte de ser elástico lo tejido, sería igual por ambos lados.

Creo que lleva entre 6 y 8 ovillos de una lana que se llama Arlequín, de color azul y rosa jaspeado. Me encanta cómo quedan las cosas con hilo jaspeado.
Es acrílica, pero no da ninguna grima tocarla ni daba grima al calcetar, cosa que sí ocurre con otras muchas lanas del estilo.

Paré cuando la bufanda medía casi 2 metros.
Es gigantesca, tanto de largo como de ancho, y abriga a muerte. Estoy convencida de que, en plena ola de frío, podría andar desnuda llevando sólo la bufanda y no pasar frío. Algún día lo comprobaré...

Y lo pequeñito de la esquina son unos mitones 100% improvisados, que hice con la lana que me sobró. En ambos extremos llevan punto elástico, y el resto es punto normal. Son algo primitivos, pero cómodos y abrigosos...                                      

Jarrón

El pequeño jarrón verde lleva muchos años en mi casa. Pocas veces le hemos encontrado más utilidad que estorbar.

Es mono pero algo soso. Hace años, le hice un rudimentario dibujo (uvas) con pintura para cristal, que finalmente borré.

Y ahí siguió, estorbando, siendo útil de vez en cuando para ramos de flores pequeños y siendo soso.

La semana pasada lo utilicé para mi experimento: decoupage sobre cristal. Pintura blanca, mariposas de colores y barniz mate dieron como resultado lo que se ve. El jarrón era totalmente mate, y con el barniz no se nota nada que esté pintado. Me gusta :D

Nuevos cuadros ^_^

En principio, esto no era un cuadro. Las flores están bordadas sobre un pantalón negro.
Después de años de uso, terminó hecho polvo y recorté el trozo bordado antes de tirar el pantalón.

Me gustaba mucho el bordado, de puntos muy sencillos y medianamente rápido de hacer.
Era una pena tirarlo, tanto por el tiempo invertido como por el resultado.
Y ahí quedó, guardado durante años hasta que, la semana pasada, se me ocurrió llevarlo a enmarcar junto con la Brujita.
En cuanto saque ganas, bordaré algo más sobre tela negra...

La foto no es muy buena, pero hago lo que puedo... Al ser el fondo negro lo refleja TODO.

¡Y por fin tengo la Brujita!! Quedó preciosísima con el marco de color rojo.

Del día de la madre...

Este año, por primera vez en mi vida y sin que me obliguen como en el colegio, le he hecho a mi madre unos regalos.

Para empezar, una cajita de madera decorada con decoupage. Sabía que quería que le hiciera alguna cajita, no hizo falta que me lo dijera.
No me resultó nada difícil saber cómo la haría. Me pasé por la tienda de manualidades para comprar barniz y, cuando vi la servilleta de las margaritas, supe que era esa. A ella le encantan las margaritas. Me lo puso a huevo...
Lo peor fue recortar las margaritas pequeñas. Como no quedaban demasiado bien las pinté yo.
Le ha encantado. =)

Otro detallito que le hice fue decorar un tarrito de crema. Lo había visto en El Rincón del Decoupage y me pareció una idea genial.
Aprovechando que se acababa de comprar una nueva crema, le robé el tarrito por unas horas y lo decoré.
Le gustó mucho, y a mí también. Algo tan sencillo como recortar una flor y echarle barniz queda muy bonito y original.

Le hice un cuadro con hortensias prensadas. Me quedó terroríficamente terrorífico. Yo lo odio, pero a ella le gusta mucho. No lo tengo claro, pero sospecho que su opinión en este caso es subjetiva: o es porque le gustan las hortensias o es porque soy su hija.
Sea lo que sea, lo enseño:

Y, finalmente, un regalito para la abuela.
Cajita pequeña + rosas de estilo antiguo = !!
Todavía está sin terminar, tengo que lijarla y darle barniz. A ver si no la cago y me queda divina...

¡Terminada! Eso sí... Todavía me queda muuuucho para aprender a hacer el craquelado.